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UN ALMACÉN AUTOMATIZADO, UN PROYECTO PARA...

20.07.2021 / NOTICIAS VISMARAVETRO
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UN ALMACÉN AUTOMATIZADO, UN PROYECTO PARA LA ARQUITECTURA

VISMARAVETRO COMPITE POR EL PREMIO ITALIANO DE ARQUITECTURA

 

 

Promovido por la Trienal de Milán y por el MAXXI –Museo Nacional de las artes del siglo XXI– con el apoyo del Ministerio de Cultura, el Premio italiano de Arquitectura es un proyecto con periodicidad anual instituido a partir de las experiencias de la Medalla de Oro a la Arquitectura Italiana de la Trienal de Milán y del proyecto YAP, Young Architects Program del MAXXI. El premio apunta a poner en valor la arquitectura italiana mediante la promoción de obras realizadas por proyectistas italianos o activos en Italia cuya labor está comprometida con la innovación, la calidad del proyecto y el papel social de la arquitectura. 

 

Vismaravetro participará en la competición de la edición 2021 con su nuevo almacén automatizado, completado según el proyecto de Enrico Molteni Architecture: una obra que representa la imagen y el espíritu de la empresa, proyectados hacia el futuro. 

 

Situado en un área industrial a lo largo de la autovía de alta velocidad SS36 que conecta Milán con Lecco y con la Valtellina, el almacén se encuentra adosado a un edificio industrial preexistente. A primera vista, su volumen cuadrangular puede parecer semejante al de los múltiples edificios destinados a la producción distribuidos en el territorio de Brianza. Sin embargo, su esencia se manifiesta a través de la luz, que revela sus cualidades esenciales, puras y auténticas como las de las cabinas de ducha que caracterizan la marca. 

 

De espíritu vanguardista, ligera y flexible, la estructura arquitectónica portante está constituida por los «muebles» de su ambiente interior. En efecto, todo el edifico apoya sobre sus estanterías: una malla compacta de tableros y montantes de acero cincado de mínimo espesor que sostiene el techo metálico. Las fachadas modulares están formadas por paneles de policarbonato alveolar blanco y negro en toda su altura, libres de juntas rígidas. 

 

En pleno día, el almacén es una caja de reflejos cambiantes que varían continuamente con los movimientos del cielo y de la mirada de los transeúntes. Pero durante la noche descubre su contenido más íntimo: es entonces cuando las luces de neón se encienden detrás de las superficies en penumbra revelando la presencia de su esqueleto estructural y dejando entrever la gran máquina que trabaja en su interior. 

 

La narración del almacén llega a su fin en un espacio alto y estrecho como una catedral gótica, compacto como una colmena de elementos repetidos y perfectamente ordenados: un archivo infinito desde donde transitan incesantemente placas de vidrio, perfiles, juntas y soluciones destinadas a construir cualquier idea de proyecto, en cualquier parte del mundo. 

 

 

Proyecto: Enrico Molteni con Ekaterina Golovatyuk 

Fotografías: Marco Cappelletti 

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